Los ejemplos que se recogen en esta publicación apuntan entonces diferentes direcciones y señalan los más diversos intereses pero, reunidos, no son solamente una compilación. De hecho, estas casas no pueden ser explicadas únicamente a partir de lo construido, y el sitio, a su vez, debe ser entendido a partir de una lectura geográfica del territorio que lo envuelve. En verdad, la intensa relación con el territorio es una base común que las vuelve solidarias. Una vez comprendido esto, la relación entre estas casas y la geografía se muestra en dos niveles. Por un lado, a través del diálogo formal que establecen con la topografía, las líneas de agua, las líneas de cumbre, la vegetación, los caminos -que se refleja a partir del primer acto de arquitectura, el de su implantación-. Por el otro, a través del direccionamiento de la mirada y de la relación que sus espacios establecen con el territorio, ahora ya transformado en paisaje